viernes, 12 de septiembre de 2008

Peñarol perdio el invicto






Quilmes derrotó anoche a Peñarol por 83 a 71 en el Estadio Polideportivo de Mar del Plata por la 6º fecha de la Copa Argentina de Básquetbol, en un partido parejo hasta la expulsión de “Tato” Rodríguez en el tercer cuarto y en donde brilló Pablo Gil con 21 puntos. Pese a la victoria, el “Cervecero” no clasificó a la próxima ronda del certamen, en donde Peñarol enfrentará a Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia por cuartos de final.
Luego de un año sin poder obtener victorias en el clásico, el equipo de Esteban De La Fuente realizó un producción prolija y con un goleo regular durante todo el cotejo, y cerró con firmeza el juego luego de la expulsión del líder “Milrayitas” promediando el tercer cuarto.
En el primer período lo más destacable fueron los 13 puntos de Gil, quien jugó con las mismas ganas que el viernes pasado pero esta vez con el aro “abierto”; y en la vereda de enfrente los 3 triples de “Tato” Rodríguez. El partido era parejo y entretenido, Quilmes era bien conducido por Hernando Salles y Jaz Cowan también conseguía sumar y atrapar rebotes para generar dudas en el cuerpo técnico sobre su corte (llegaría Marcus Fleming el lunes para reemplazarlo).Por el lado de Peñarol, Román González lastimaba el aro rival y cuando no lograba hacerlo metía buenos pases al compañero mejor ubicado y David Jackson comenzaba a hacer de las suyas cuando con un triple suyo pasaban al frente en el marcador a 2:58m para el cierre dejando un parcial de 15-17. Pero enseguida fue contestado por otro tiro lejano de Gil para volver a dejar al “Tricolor” arriba por la mínima, motivo por el cuál Sergio Hernández pidió tiempo muerto. Para los dos últimos minutos De La Fuente metió a Ezequiel Dentis por Pedro Calderón, “Tato” convertía otro triple, llegaba un doble con yapa de Gil y el final fue con una espectacular volcada de Byron Jonson para dejar un parcial favorable a Peñarol de 23-24.
Para el segundo cuarto los entrenadores movieron el banco, entró “Pepe” Muruaga por Sebastián Vega de bajo rendimiento y enseguida convirtió dos triples para sacar la máxima diferencia hasta ese momento con un parcial de 25-30 a 08:45m para el cierre. En Quilmes ingresaban Esteban López, Nicolás Romano y Dragan Capitanich y en el “Milrayitas” hacían lo mismo Alejandro Reinick, Lucas Picarelli y “Pamperito” Diez. Este período fue más luchado y con menos goleo que el anterior, Maxi Maciel estaba “desaparecido” y ni se acercaba a lo realizado en el clásico jugado el viernes pasado donde fue la figura y goleador. De La Fuente pidió minuto a 5:00m para el cierre con un parcial de 32-34, hizo ingresar a Salles y Calderón y Hernández a “Tato” y Román para emparejar el asunto. Comenzaba a aparecer y ser importante en el desarrollo del juego Romano y el trámite del cotejo continuaba siendo parejo, llegaba un triple de Jackson, otro de Calderón y a 0:45m para el cierre un doble de Pablo Gil tras una excelente asistencia de Romano luego de un robo de Dragan Capitanich a “Tato” Rodríguez dejaba el marcador favorable al “Cervecero” por 44-42 al término de la primera mitad.
Durante los primeros cuatro minutos del tercer cuarto Quilmes salió con todo y apabulló a un desorientado Peñarol con un parcial de 12-0 para sacar la máxima diferencia en cancha dejando el marcador 56-42 a 6:33m para el cierre. A esa altura la hinchada quilmeña explotaba y comenzaba a saborear lo que sería un final feliz. Sergio Hernández pidió tiempo muerto a 5:00m para el final para tratar de acomodar un poco las cosas. Dos dobles de Vega y uno de “Tato” volvieron a dejar en partido al “Milrayitas” y resurgía la figura de Román (7 puntos en este cuarto) para continuar en la pelea. Pero llegó un triple de Pablo Gil y también lo que sería un quiebre en el encuentro: a 02:45m para el cierre se va de la cancha “Tato” Rodríguez por acumulación de faltas, tras ser sancionado con dos técnicos, luego de una pelea con Pablo Gil. Peñarol se quedaba sin su líder, el estadio “explotaba” y el clásico se picaba. Luego de los dos simples convertidos por la figura quilmeña llegó un golazo de Nico Romano para dejar un parcial de 63-55 a 01:20m para el final.
Para el último cuarto Sergio Hernández le dio la base a Picarelli, quien no anduvo bien y se volvió a sentar en el banco. La conducción pasó a ser responsabilidad de Muruaga y Jackson y en Quilmes se entendían bárbaro Salles y Esteban López para crear juego. Apareció Johnson luego de una larga “siesta” para convertir 6 puntos y dejar otra vez a tiro al “Campeón de América” con un parcial de 66-63 a 04:56 para la chicharra final. Otro que se despertaba era Maciel y clavaba un triple, pero enseguida Muruaga se lo devolvía. Igualmente Peñarol comenzaba a sentir la ausencia de su base y líder natural, situación bien aprovechada por Gil y compañía. Era un partido bárbaro y otra vez excitante. Nico Romano continuaba creciendo y siendo clave por convertir y asistir como por ejemplo a Esteban López que tiró desde los 6.25 para dejar arriba a Quilmes con un parcial de 72-66 a 03:50 para el cierre. Calderón se iba por faltas acumuladas y con un esguince de tobillo. Jaz Cowan, de buen partido (15 puntos / 12 rebotes), definía el partido cuando encestó luego de tomar un rebote ofensivo a 01:45m para el final y dejar el tanteador 78-69. A esa altura la parcialidad “Cervecera” disfrutaba de un gran triunfo sobre el clásico rival luego de un largo año de sequías.
Síntesis:
Quilmes (83): Hernando Salles 6, Pablo Gil 21, Maximiliano Maciel 6, Jaz Cowan 15 y Pedro Calderón(X) 9 (FI). Dragan Capitanich 0, Esteban López 8, Nicolás Romano 14 y Ezequiel Dentis 4. DT: Esteban De la Fuente.
Peñarol (71): Sebastián Rodríguez (X) 11, David Jackson 11, Sebastián Vega 4, Byron Johnson 10 y Román González 19 (FI). Lucas Picarelli 0, José Muruaga 9, Alejandro Diez 4, Alejandro Reinick 2, Facundo Campazzo 1, Facundo Varela 0 y Matías Ruger 0. DT: Sergio Hernández.
Parciales: 23-24, 44-42 y 63-58.
Árbitros: Alejandro Chiti y Juan Fernández.
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.

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