Boca Juniors y Peñarol estuvieron en la definición de la Copa Argentina y se enfrentaron en la segunda jornada, el sábado pasado, cuando los marplatenses se impusieron por 88-80, con 22 puntos y 7 rebotes de Román González y 18 tantos de David Jackson.
Oscar Sánchez, el técnico de Boca, hizo un balance de la actuación en la Copa Argentina: “En lo positivo hay que destacar la actitud que tienen como equipo. Si bien tácticamente faltan ajustar las rotaciones, mejoramos defensivamente. También hay que destacar las ganas para intentar dar vuelta los resultados adversos. Todavía son muchas las cosas para mejorar, estamos flojos en el ataque rápido, hay que correr más”.
“El equipo lleva 49 prácticas, de las cuales las primeras fueron entrenamientos físicos, después algunos imponderables hicieron que tengamos que improvisar jugadores en puestos que no son los habituales, pero esto es algo normal que ocurra en esta etapa de preparación”, agregó Sánchez.
Con la supervisión del profesor Marcelo Magliarella, esta semana hicieron un trabajo diferenciado Carl Edwards y Juan Espil, quienes se recuperan de sus lesiones y son reemplazados por Anthony Johnson y Juan Marcos Casini, respectivamente.
El base Nicolás Aguirre comentó sobre el presente de Boca: “Estamos bien, poniéndonos en ritmo de juego. Hace dos meses que estamos juntos, entrenando fuerte para afrontar la competencia. Con la llegada de Anthony Jonson estamos tratando de conocerlo rápido para poder aprovechar su juego”.
Con respecto a Peñarol, al que ya enfrentó en la Copa Argentina, opinó que “es un equipo duro, el partido que jugamos espero que nos sirva para corregir errores y podamos empezar la Liga con un triunfo. Para mí es un partido especial, estoy agradecido a Quilmes, que fue el primer equipo que me dio la oportunidad de jugar en la competencia mayor del basquet y sé cómo es la rivalidad entre esos dos equipos.”
A pesar de que se trata de dos grandes equipos de la Liga Nacional, Boca tiene amplia ventaja sobre Peñarol en el historial liguero: ganó 42 de las 67 oportunidades en que se enfrentaron.
Oscar Sánchez, el técnico de Boca, hizo un balance de la actuación en la Copa Argentina: “En lo positivo hay que destacar la actitud que tienen como equipo. Si bien tácticamente faltan ajustar las rotaciones, mejoramos defensivamente. También hay que destacar las ganas para intentar dar vuelta los resultados adversos. Todavía son muchas las cosas para mejorar, estamos flojos en el ataque rápido, hay que correr más”.
“El equipo lleva 49 prácticas, de las cuales las primeras fueron entrenamientos físicos, después algunos imponderables hicieron que tengamos que improvisar jugadores en puestos que no son los habituales, pero esto es algo normal que ocurra en esta etapa de preparación”, agregó Sánchez.
Con la supervisión del profesor Marcelo Magliarella, esta semana hicieron un trabajo diferenciado Carl Edwards y Juan Espil, quienes se recuperan de sus lesiones y son reemplazados por Anthony Johnson y Juan Marcos Casini, respectivamente.
El base Nicolás Aguirre comentó sobre el presente de Boca: “Estamos bien, poniéndonos en ritmo de juego. Hace dos meses que estamos juntos, entrenando fuerte para afrontar la competencia. Con la llegada de Anthony Jonson estamos tratando de conocerlo rápido para poder aprovechar su juego”.
Con respecto a Peñarol, al que ya enfrentó en la Copa Argentina, opinó que “es un equipo duro, el partido que jugamos espero que nos sirva para corregir errores y podamos empezar la Liga con un triunfo. Para mí es un partido especial, estoy agradecido a Quilmes, que fue el primer equipo que me dio la oportunidad de jugar en la competencia mayor del basquet y sé cómo es la rivalidad entre esos dos equipos.”
A pesar de que se trata de dos grandes equipos de la Liga Nacional, Boca tiene amplia ventaja sobre Peñarol en el historial liguero: ganó 42 de las 67 oportunidades en que se enfrentaron.
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